Sistema de incentivos: ofrece estos 7 beneficios a tus equipos y ¡supera tus objetivos!

Un sistema de incentivos es un plan de acciones enfocado en motivar a los trabajadores, retenerlos y darles razones para que sigan entregando lo mejor de sí cada día en la empresa. En muchos casos, puede funcionar como una especie de reconquista ante una situación en la que el trabajador siente que su relación con la empresa experimenta un desgaste.

¿Te está pasando?, ¿estás buscando estimular a tus equipos de trabajo?, ¿quieres evitar la fuga de talentos?, ¿mejorar la productividad? Si es así, entonces este artículo es para ti, ya que conocerás qué incentivos laborales puedes implementar en tu empresa para impulsar el desarrollo integral de tus trabajadores.

Como regla de oro es fundamental entender que la mejor inversión que puede hacer toda empresa es apostar por el bienestar de su capital humano, así que acompáñame hasta el final de la nota y verás que estos consejos te darán excelentes resultados.

Bien, para empezar, hay que destacar las ventajas de implementar un sistema de incentivos:

  • Aumenta el grado de compromiso del trabajador con la empresa
  • Fomenta un buen clima laboral
  • Atrae más talentos
  • Aumenta la productividad
  • Se cumplen o superan los objetivos corporativos

¿No es fabuloso? Ahora presta atención a qué incentivos laborales puedes implementar para tu empresa.

¿Qué incentivos laborales puedes implementar?

Existen varios tipos de incentivos laborales que puedes implementar en tu empresa. A continuación, te detallamos algunos de ellos.

1. Cupones de días libres

Este método estimula el desempeño laboral. Permite a los trabajadores disponer de más tiempo para avanzar sus proyectos personales, pasar más tiempo con la familia, relajarse en algún centro de masajes, conversar larga y tendidamente con las amistades en algún lugar agradable, hacer deporte, implementar mejoras en el interior de la vivienda, darse una escapada a un sitio turístico cerca de su localidad. Cualquiera que sea la actividad personal que realice el trabajador en su tiempo libre, se sentirá recompensado.

Recreación familiar. Fuente: Pexels.

2. Descuentos exclusivos

Los descuentos exclusivos pueden aplicarse en cupones para restaurantes, gimnasios, tiendas de ropa, tiendas de calzado, supermercados y cines. El trabajador paga un porcentaje inferior al precio normal del producto que se desea comprar o el servicio que se va a requerir.

Esto depende mucho de los convenios que establezca la empresa con sus proveedores. Hay casos, en los que por la adquisición de algún artículo se da la posibilidad de pagarlo por cuotas y se descuentan del sueldo cada mes. Es un beneficio ideal para cuidar la economía del trabajador.

¿Todavía no es parte de tu plan de incentivos laborales? ¡Anímate a probarlo!

Ofertas especiales. Fuente: Pexels.

3. Bonificaciones

Los bonos de alimento, de escolaridad, de permanencia y de productividad son los incentivos laborales más utilizados en el mercado. Es importante definir cuáles son las metas trazadas, evaluar la condición de necesidad de los trabajadores y la percepción de equidad en el ambiente laboral que se debe fomentar al momento de aplicarlas, así como cuidar que el trabajador no se exceda en su jornada laboral, ni sufra estrés en el afán de superar las expectativas de sus empleadores.

Este punto debe ser tomado con pinzas, ya que si se percibe un clima de injusticia en la distribución desigual de las bonificaciones, se puede generar un ambiente hostil, incómodo y el inicio de múltiples reclamos. Precisamente, un estudio de Harvard Business Review, publicado en 2017 para la revista académica Human Resource Management Journal, reveló que contrariamente a lo que se piensa de lo positivo que pueden ser las bonificaciones, si no se aplican “para una gran porción” del personal pueden suscitar serios problemas.

 4. Competencias deportivas

Qué mejor manera de cuidar el desarrollo integral de los trabajadores que promoviendo el deporte, el cual, sin lugar a dudas, nos regala experiencias positivas y memorables. Además, estrecha la relación entre las distintas áreas, integra a los nuevos talentos y las emociones se desbordan en plena competición. Es uno de los mejores ejemplos de incentivos laborales que toda empresa debería fomentar para contribuir con la salud de sus equipos de trabajo.

5. Capacitaciones

Las capacitaciones son ideales para fortalecer el aprendizaje de los trabajadores. En ese sentido, las empresas pueden establecer convenios con universidades e institutos de idiomas, de tecnología, de arte y diseño, con el fin de profundizar el conocimiento de sus equipos de trabajo a una tarifa especial. De igual modo, pueden contratar a profesionales reconocidos en su campo para dictar charlas, talleres o cursos que los ayuden a alcanzar los objetivos corporativos.

 6. Reconocimiento social

¿Por qué es importante el reconocimiento social en una empresa? Entre los principales beneficios de este incentivo laboral no monetario, destacan los siguientes:

  •  Mejora la autoestima
  •  Inyecta nuevas energías
  • Alimenta las ganas de seguir superándose
  •  Motiva a los demás a seguir esforzándose
  • Visibiliza las fortalezas

¿Ya viste el increíble impacto que puedes generar con un mensaje de felicitaciones?

Reunión de trabajo. Fuente: Pexels.

7. Buen clima laboral

Un buen clima laboral implica un conjunto de características que determinan la sensación de bienestar de los trabajadores, entre ellas podemos resaltar las siguientes:

  • Valores compartidos
  • Comunicación horizontal
  • Igualdad salarial
  • Igualdad de trato
  • Respeto de los derechos laborales

Todo esto conlleva a construir una imagen positiva sobre la empresa y, en consecuencia, la reputación se verá fortalecida, así como las ventas y todo el personal. Si por el contrario la percepción es negativa, no solo nadie va a querer trabajar en ese lugar, sino que las pérdidas económicas serán abrumadoras y la rotación será muy elevada. Fomentar un ambiente de trabajo sano debe ser un objetivo contínuo.  

Actualmente, con la visibilidad que les otorgan las redes sociales a los problemas del mundo, es muy fácil enterarse de si las empresas están alineadas con los valores morales legítimos de la sociedad. El comportamiento de estas nos permite saber hacia dónde se dirigen y si sus acciones nos revelan cierto grado de progreso social o no.

¿Cómo hacer un plan de incentivos laborales?

Antes de elaborar un sistema de incentivos, es importante conocer las necesidades, gustos y situaciones que atraviesan los trabajadores, además, de identificar qué áreas de la empresa necesitan ser reforzadas. Los cuestionarios son una forma eficaz de conocer a profundidad estos aspectos y la información que revelarán será de gran utilidad para escoger qué beneficios se adecuan mejor a esas necesidades.

La plataforma HubSpot, especialista en estrategias de marketing, recomienda formar un equipo que reúna a representantes de diversas áreas, ya que ópticas variadas contribuirán a enriquecer el plan de incentivos. Por ejemplo, puedes integrar en el equipo a un representante de recursos humanos, otro de marketing y de ventas. Asimismo, es importante saber qué presupuesto dispone la empresa para implementarlo, cuáles son los plazos y las metas que desea lograr.

Ahora que ya tienes un panorama más completo sobre el sistema de incentivos, ¿cuáles crees que se adecúan mejor a los deseos de tus trabajadores? Haz un estudio minucioso, analiza los resultados, coordina con los voceros de cada área y ¡manos a la obra! Recuerda que los incentivos laborales tienen efectos positivos en el estado de ánimo y la productividad.  ¡Un equipo sólido y bien recompensado es la base del éxito de toda organización! ¡Sé una empresa de primer nivel!